Colombia entre el Terrorismo y Guerra Asimétrica Jurídica.
Colombia entre el Terrorismo y Guerra Asimétrica Jurídica.
Por Coronel Pedro Alberto Restrepo A.
Bien sabemos que el terrorismo tiene como objetivo, causar terror, y que su efecto después del 09 de septiembre del 2011, modifico el escenario de la guerra, (Campo de Combate), desplegando así el concepto de guerra asimétrica, aplicado a las guerras del siglo XXI, cuya característica se basa en la conjunción de todos los medios irregulares, (sin principios), para la conquista de un objetivo.
En ese contexto, los colombianos no hemos entendido que el secuestro, individual o colectivo, son actos terroristas, que en desarrollo de la guerra asimétrica, se hacen cada vez más letales, en razón a que se esta empleando a la población civil, como dinamizador de una estrategia de Paz Total, hechos evidenciados el sábado, 21 de octubre del 2023, donde se produjo el secuestro de 18 soldados pertenecientes al Comando Específico de Oriente, en la zona rural de San José del Guaviare por citar el más reciente, sin mencionar las prácticas sistemáticas por parte de las comunidades indígenas del Cauca. La estrategia les ha funcionado tanto a las farc, quienes pomposamente exhiben a sus Congresistas, sin responsabilidad o preocupación en mediar con propuestas para no instrumentalizar a la población civil, e igual funcionan para el Eln, quienes, ante su anarquía de mando y control, se mantienen firmes en el despropósito del secuestro, como fuente de financiación.
El no entender esta guía estratégica terrorista, ha llevado al Ministerio de defensa, a correr la línea constitucional de la protección del estado, (Art.217 C.N.), y condicionarla a los decretos del gobierno, de cese al fuego, que riñen con la misionalidad de las FFMM. Una vez más soldados y policías humillados por el pueblo que presionado, actúa como punta de lanza, en una aberrante práctica de escudos humanos aplicada en las zonas rurales, que más temprano que tarde veremos en los cascos urbanos, ya no solo expulsando al ejército, sino también a la policía o a las autoridades administrativas, dado que estas prácticas no se combaten con una estrategia militar, obedecen a un perfil eminentemente jurídico – social, de urgente e inmediata aplicación.
Lo peor está por venir, para los veteranos de las FFMM y de policía cuya dinámica política aunque débil, se hizo contar a través de diferentes partidos, logrando, 01 Gobernador, 12 Alcaldes, 07 Diputados, 45 Concejales, y 09 Ediles, quienes animados por recuperar la institucionalidad, pasaran a ser el nuevo caballo de batalla, pues los escándalos mediáticos al interior de las fuerzas militares, buscan dividir y debilitar aun mas a una institución, respetada y querida por los colombianos, para que reducida la capacidad ofensiva, operacional y su moral, se facilite el Golpe Duro contra los nacionales, quienes a pesar de todo, ven con optimismo el papel de estos, que ahora mejor organizados, con capacidad de movilización, y respaldo de una sociedad sedienta de ética, y honradez; estarán bajo asedio con la estrategia de la guerra asimétrica jurídica, cuya aparición en escena se estrenó con el proyecto de Penalización a la Obstrucción a la Paz, de Iván Cepeda, que aunque se retiró, para ser “perfeccionada”, ya es constituye una alerta temprana.
