Revolución o Terrorismo Social de Estado
Por coronel Alberto Restrepo Arboleda
La revolución y el terrorismo son términos no siempre relacionados, pero que al final del clímax ideológico, se funden fervorosamente en la lucha armada, buscando cambios “políticos”, que en la mayoría de los casos generan anarquía y terminan eternizando dictaduras democráticas
Mao Tse-Tung, estaba horrorizado por las desigualdades que veía entre ricos y pobres, entre la ciudad y el campo, entre hombres y mujeres, quería un cambio social, político y económico en China”. Mao llega a la cima del poder en 1949, declarando la República popular China, luego de 28 años de lucha. Durante este periodo el revolucionario se transforma en un dictador, quien motivado por la ideología Marxista, conduce al pueblo a su peor pesadilla pues esperanzados en el cambio a través del anunciado plan del Gran Salto Adelante, marcharon con él, causando el mayor desastre económico y fratricida en la historia del mundo. La similitud hoy con “ La Paz Total”, de Petro , guardadas la proporciones, es otro desastre en curso.
El Gran Salto, causó la muerte entre 20 y 45 millones de chinos, entre 1958 y 1962, reconocidos hoy por el presidente actual, Xi Jinping, quien dice que Mao no fue un “dios” y que cometió muchos errores.
El Ejército Rojo que venciera al ejército del estado, se convirtió en el mayor verdugo del pueblo chino, milicias irregulares, equivalentes en Colombia a las narcoguerrillas, primera líneas, milicias indígenas y urbanas, todas confluyeron en el ideal, del mandatario que dice que él va, hasta donde el pueblo diga, muy cercano a los designios marxistas de Mao.
Este terrorismo social de estado, termino no muy acuñado en la academia, tiene por consigna el uso indirecto y deliberado de la violencia y el terror contra la población civil, fuerzas militares y policiales, quienes, acorralados, sin apoyos terrestres, fluviales o aéreos, quedan aislados por determinación del gobierno, para mantener un cese al fuego y Caos Total.